Una alternativa para evitar sustos en la carretera, son los neumáticos Run Flat, cuya principal característica, es la de permitir al vehículo circular con seguridad a pesar de que se haya producido un pinchazo.
Esto es gracias a una tecnología de refuerzo, colocada en los flancos, que consigue que cuando se produzca un pinchazo, el neumático no estalle ni tampoco pierda gran cantidad de aire ni presión. Es decir, los neumáticos RunFlat se pinchan y pierden aire, pero a diferencia de un neumático convencional, lo hacen de forma más gradual. Al presentar una baja pérdida de presión y no deformarse al pinchar, consiguen rodar unos 80 kilómetros más, a una velocidad máxima de 80 Km/h a partir del momento del pinchazo.